Lo que aprendí en el 2019 y lo que quiero que pase en el 2020.

Ene 4, 2020 | Viajes | vida | tips

Muchas cosas aprendí en el 2019 de las cuales me siento orgullosa y quiero compartirlas con ustedes. También descubrí verdades y cometí errores que también quiero contarles para que, si lo leen y se sienten identificadas, puedan cambiarlas.

  1. Programación absurda. Desde que tengo consciencia, soy una mujer realmente programada. Soy tan programada al punto que escribo mis rutinas, organizo mis horarios, dejo lista la ropa mía y de Cristóbal para el día siguiente, me programo en todo. Qué hace esto en mi vida? Me ayuda a calmar la ansiedad: siento que si dejo la ropa desde la noche anterior, puedo descansar en paz. En conclusión mi vida programada me permite estar en paz y eso es bueno. Lo que no es bueno es cuando tratamos de programar todo y no eres flexible. Vivimos en un mundo que todo cambia, que las circunstancias pueden variar de la noche a la mañana y por más que te organices, no funciona.

Me casé hace 12 años con una persona que cambia constantemente. Chapi tiene un plan organizado en la noche, y por la mañana se levanta con otro. Al comienzo de mi matrimonio, casi me enloquezco tratando de entenderlo, pero ahora veo que Dios es tan bueno que me puso en el camino la persona perfecta para mi vida cuadriculada. Imagínense un hijo cuadriculado al 1000? Con él he aprendido a soltar, a relajarme si hay un cambio de planes, de soltar.

En el 2019 y este año quiero soltar más. A ver me explico. No voy a dejar mi personalidad controladora porque eso me ayuda a mi ansiedad, pero sí en cosas que se salen de mi, tengo que soltar y más porque me doy cuenta que no pierdo nada. Te doy un ejemplo. Entreno 4 veces a la semana. Es parte de mi rutina y de mi vida, me hace feliz y siento que mi cuerpo me lo agradece. Pero, como pasó este año, si tengo un trabajo de 1 semana que tiene 12 horas seguidas, que si tengo un viaje sorpresa para visitar a mi abuela, NO voy a sentirme mal si no puedo entrenar, a mi cuerpo NO le pasa nada, al contrario me lo agradece por el descanso. Cuando regreso retomo y listo, la vida sigue. Eso sí tengo la cabeza fría que cuando llego lo retomo, no soy fresca de darme 3 meses de descanso.

  • Pensar un poquito más en mí. Soy hija única y soy egoísta por naturaleza. Sin embargo, cuando te casas y tienes hijos, la mayoría de lo que quieres es para ellos: vives por ellos, trabajas para ellos, tú felicidad es la de ellos. Y en parte es verdad. Yo me alegro montones con los logros de mis chicos pero también me hace bien hacer las cosas que me gustan. Ya Cris es un grande y cada día quiere estar más con sus amigos, ahora yo también quiero hacer cosas que a mí me gustan. En el 2019, a pesar de mi dolor de dejarlos, pude irme a visitar a mis amigas a NYC y la pasé bomba: tiempo para mí, descanso, lectura de libros, tomar cafés en sitios que me fascinan, estar en una ciudad que amo. Cuando estoy bien yo puedo estar bien para ellos. Así que primero yo.
  • Otra de las cosas que aprendí y quiero seguir en el 2020 es saber decir NO. A mis lindos 40 años sé lo que me gusta, lo que me sienta bien, con lo que me veo bien. Si bien estoy abierta a escuchar lo que piensan los otros, también estoy dispuesta a decir: no gracias paso. Un ejemplo de esto es cuando pedía un plato en un restaurante o en una casa y me daban algo que no me gustaba o estaba llena seguía comiendo, pueden creer? Por pura decencia? Eso ya no lo hago. Si estoy llena paro, si no me gusta no me lo como, si no me sienta bien, lo digo considerablemente. Saber decir NO cuesta pero tiene grandes recompensas.
  • Disfrutar cada día porque simplemente no sabemos qué pasará mañana. Cada año soy más consciente de agradecer por todas las bendiciones que tengo. Todos los días me levanto y doy gracias a Dios por mis: pies para caminar, oídos para escuchar los buses o pajaritos, manos para tocar y cocinar, ojos para ver y leer, boca para saborear, olfato para oler los sabores que cocino. La vida es un ratico y entre más te lo recuerdas más consciente eres de ello. Sí cambiaría muchas cosas PERO no me quedo en cambiar sino en valorar y agradecer. SOY FELIZ CON LO QUE TENGO. Cuando veo a mi abuela, una mujer de 84 años que vivió al máximo su vida, comió pésimo, tomó trago, bailó, no tenía filtros y ahora la veo en su demencia, que no puede tomar ni siquiera agua porque broncoaspira me doy cuenta que, debo aprovechar todo lo que tengo mientras tengo salud y vida.
  • No quiero ofenderme. En un podcast que oí en el 2019 de Joyce Meyer decía que todas las mañanas debíamos empezar con una frase que es: NO QUIERO  SENTIRME OFENDIDA. Desde hace días la practico y siento que ha cambiado mi visión de vida totalmente. Ahora, con las redes me doy cuenta que, por todo nos ofendemos, somos CERO tolerantes y nos pasamos criticando todo. Yo no quiero llenarme de odio y ofensas con nadie. Todo el mundo tiene su cuento y su vida, así que si no me saludan, son groseros, o simplemente no actúan como yo quiero no me corresponde ofenderme: allá ellos y su mundo. Me quito mucho peso de encima.

Les dejo estas 5 cosas para ver si me entienden y se sienten identificados. Aquí abajo les comparto mi lista de propósitos para el 2020. Si leen en el blog los de 2019, una lista cautelosa y minuciosa me ayudan muchísimo para ver si lo logré o qué pasó con los que simplemente no cumplí o lo hice a medias. Entre más detallada son más pasitos para sentirme feliz. Lo súper recomiendo y más cuando la tienes visible (yo la hago en el bloq de notas del celular).

  • Leer la biblia todos los días y tener mi momento de oración todas las mañanas.
  • Oir podcast con mi desayuno o cuando camino.
  • Tomar agua (ya compré la botella). Esto incluye el agua mineralizada en ayunas que tomo 5 de 7 veces al día.
  • Dormir dormir y dormir (este propósito lo escribo siempre y puedo ver cómo he mejorado mi sueño, me impacta y me sorprende para bien).
  • Bañarme en las noches (algo que quise en el 2019 pero no lo cumplí al 100 porque me da locha).
  • Entrenar 4 veces a la semana y seguir con mis abs.
  • Hacer 2 veces a la semana fasting de 16 horas (ya lo empecé en el 2019 y me funciona súper) y 5 veces a la semana 12 horas.
  • Cocinar cocinar y cocinar. Amo este próposito porque me apasiona lo que hago.
  • Trabajar más horas. Me cuesta mucho concentrarme así que debo escribirlo para que no se olvide.
  • Leer 13 libros en el año (los escribo también los que voy leyendo).
  • Organizar algo 1 vez a la semana (este es pequeño y espero organizar más pero prefiero hacerlo de a pocos).
  • Comprar algo y sacar algo que no necesite (principio aplicado en año pasado y funciona perfecto, cero acumulación).
  • Salir 1 vez con CF en la semana (nuestros dates siempre han sido fundamentales para nuestra vida de pareja, los amo).
  • Tomarnos una copa de vino en la terraza antes de salir de date (el año pasado no lo logramos casi nunca y nos fascina así que lo escribo).
  • Aprender algo nuevo. Todos los años tomo un curso online de algo y siento que me renueva. Este año buscaré algo que me interese (lo hago corto para ser realista). El año pasado tomé uno de autoretratos (no me mató) y uno de conservas (tampoco me gustó).
  • Leer con Cris (empezamos con Cris lectura en las noches, yo le leo y él se acuesta y me pone atención. Cris no le gusta leer y esto siento que nos ayuda a conectarnos).
  • Conocer un sitio diferente. El año pasado se cumplió mi sueño: conocí Aruba y Portugal. Este año empiezo con Boquete que soñaba desde hace 12 años. Me gusta conocer y levantarme en otros mundos.
  • Seguir con mi contenido de trabajo. Buscar opciones que me divierten, dar clases, empezar proyectos nuevos y terminar los que tenemos ya en marcha. Formalizar muchas más cosas que tengo en mente.
  • Ir a Europa en diciembre. Amo Europa en navidad sueño con hacerlo este año con los míos.
  • El año pasado, en Aruba empezamos con rompecabezas, este año quiero seguir la tradición: podcast, desayuno y rompecabezas. AMOOOOO este plan.
  • Una noche en casa con Chapi hacer algo diferente (sí que es difícil) no lo hemos logrado porque llegamos mamados y nos cuesta. Vamos a ver qué tan motivados estamos este año.
  • Cocinar para alguien al mes. Hemos tenido invitados este año que nos sorprenden y aprendemos de ellos montones. Quiero que esto se vuelva tradición: aprender algo de mis invitados. Vivir el momento y compartir.
  • Más juegos menos tecnología. Quiero dejar el celu a las 7 pm lejos de mí, no comer con el celular en la mesa (así esté sola).
  • Caminar mínimo 70 mil pasos en la semana (me costó mucho el año pasado pero este voy a lograrlo).
  • Disfrutar más la terraza en casa. Uno de los propósitos de este año es ahorrar más para salir más. Para eso dijimos que vamos a cuidar nuestras salidas a restaurantes y comer más en casa.
  • Menos dulce en el año comer 2 veces en la semana mis preparados pero entre semana cero cero. Quiero hacer 2 detox este año. En febrero y en octubre para liberar.
  • Oír más música. Empezar el desayuno con música y cuando me baño.
  • NO poner despertador los fines de semana!!!!
  • Poner sorpresitas en la almohada de los dos.

Son puntuales, específicos y que hacen feliz a mi. Te los comparto, tal vez alguno te pega y sino te inspira para hacer los tuyos.